“heart-on-a-chip”.

Un nuevo paso para dejar de experimentar con animales.

Investigadores de la Universidad de Berkeley han desarrollado un nuevo dispositivo que simula el corazón humano y que, entre otras cosas, ayudará a evitar realizar pruebas de medicamentos con animales.

l nuevo “corazón en un chip” [heart-on-a-chip] almacena células del corazón vivas y latientes, un gran avance para la ciencia médica. El profesor Kevin Healy afirma que su dispositivo es un método más eficaz, preciso y menos costoso para probar medicamentos para enfermedades cardíacas.

Normalmente, los seres humanos son demasiado débiles para someterse a ensayos clínicos, por lo que se emplea para ello animales. Con este método, además de provocar sufrimiento a estos inocentes seres, resulta que se obtienen tasas de fracaso muy altas a la hora de predecir las reacciones humanas.

“En última instancia, estos chips podrían reemplazar el uso de animales para detectar drogas para la seguridad y eficacia”, explica Healy. También podría reducir el coste de llevar un medicamento al mercado.

En el estudio publicado por la revista Scientific Reports, los investigadores explican cómo el dispositivo de silicona, de tan sólo unos centímetros de largo, ofrece un campo de pruebas de seguridad para una variedad de compuestos.

Células pulsantes del músculo cardiaco, obtenidas a partir de células madre adultas, se colocan en el dispositivo, que copia la estructura 3D de cómo las células crecen en el corazón.

Como puede verse en el vídeo, veinticuatro horas después de que las células del corazón se cargaran en la minúscula cámara, comienzan a latir por su propia cuenta a un ritmo normal. El tejido creado se mantiene funcional durante varias semanas, tiempo suficiente para poder realizar pruebas.

El Doctor Healy espera que este proceso se utilice para probar varios medicamentos y eliminar la necesidad de utilizar animales en el futuro.

Fuente: The Good News Network.